La Diáspora Dominicana

La comunidad dominicana en la ciudad de Nueva York es de casi 900 mil personas, no solo es numerosa, sino que es influyente, dinámica y es parte clave del motor económico, social y cultural de la Gran Manzana. Los dominicanos han visto en Nueva York un segundo hogar, y su aporte va desde el emprendimiento y gastronomía, hasta el arte y la política. El aporte, en forma de remesas, que envía esa diáspora, fortalece la economía nacional. Mientras que en suelo neoyorquino los dominicanos han construido negocios, liderado causas comunitarias y llevando ese don de gente, resiliencia y trabajador que caracteriza al dominicano.

Ese peso específico no pasa desapercibido para quienes aspiran a dirigir la ciudad. Los principales candidatos a la alcaldía, como Eric Adams, Zohran Mamdani y Andrew Cuomo, reconocen públicamente la relevancia de esta diáspora. Su presencia en eventos como la Gran Parada Dominicana de Manhattan no es casual, es un gesto político y simbólico que confirma que la voz dominicana importa en las decisiones locales. Allí, entre música, banderas y orgullo patrio, se reafirma que los dominicanos no solo forman parte de Nueva York, sino que son relevantes para las tomas de decisiones políticas que afectan a la llamada "capital del mundo".

La Gran Parada Dominicana es mucho más que una celebración; es una plataforma de visibilidad y una oportunidad que aprovechan los políticos para fortalecer lazos entre la comunidad y las autoridades. Los dominicanos son parte importante en el desarrollo de una de las principales capitales del mundo. Los políticos estadounidenses reconocen el poder e importancia de esta diáspora; ahora es tiempo de que más dominicanos se sumen a cargos electivos de la ciudad, y puedan aportar al desarrollo de la ciudad y la defensa de los mejores intereses de los ciudadanos latinos. Nueva York late también al ritmo de los dominicanos, y su presencia seguirá marcando el pulso de la “capital del mundo”.