Francisco

"La muerte no es el fin de algo, sino el comienzo de algo"

El Papa Francisco será recordado como uno de los más influyentes y más cercanos de nuestra era. Su papado, iniciado en 2013, estuvo marcado por una visión renovadora y un esfuerzo genuino por conectar los valores de la fe con los retos y aspiraciones de la humanidad en pleno siglo XXI.

Francisco entendió que el mensaje cristiano debía dialogar con los jóvenes, las nuevas generaciones, pero reforzando la fe de los ya seguidores. Se propuso romper los muros burocráticos de la iglesia, hacerla más cercana, compasiva y menos rígida. Fue el Papa de la sencillez, de los gestos cotidianos que conmovieron a creyentes y no creyentes.

Su legado es importante para la continuidad, expansión y sostenibilidad de la fe y creencia en la iglesia. En estos momentos, debemos de seguir el ejemplo que nos deja de ser mejores, ser más humanos y de mirar el futuro con esperanza.