Alcaldía del DN vuelve a impactar miles de niños con plásticos por juguetes

Santo Domingo.-La Alcaldía del Distrito Nacional, como de costumbre volvió a ser el punto de encuentro para miles de padres, acompañados de sus hijos, para realizar el emotivo intercambio de plásticos por juguetes, evento que se ha convertido en una tradición en la capital.

A pesar de la animación que ofrecían personajes como Bob Esponja, los Reyes Magos y Aquiles Correa, los niños no parecían prestar atención a los festejos. Con sus bolsas llenas de plásticos, salían de la alcaldía felices, algunos con bicicletas nuevas en mano.

Dafne Peña, una niña de 10 años, se encontraba en la fila sin expectativas particulares, simplemente comentando que "coge lo que den" mientras esperaba pacientemente su turno en el área de pesaje, al igual que muchos otros niños.

Esta edición representó la quinta vez que se lleva a cabo la iniciativa, que nació en 2021, y que ahora ha logrado proporcionar juguetes a miles de niños del Distrito Nacional, al tiempo que se reciclan toneladas de residuos plásticos para convertirlos en mobiliario urbano en parques, gracias a la Fundación Botellas de Amor.

La alcaldesa Carolina Mejía, quien estuvo acompañada de su padre, el expresidente Hipólito Mejía, destacó la importancia de la actividad y expresó su apoyo a la causa ambiental. “Debemos reconciliarnos con la naturaleza y entender lo crucial que es cuidar nuestros ríos, mares y todo el entorno”, afirmó la alcaldesa.

En esta edición, Mejía destacó que la cantidad de juguetes disponibles era el doble que en la edición anterior, donde se distribuyeron 7,323 juguetes. También señaló que la organización de la actividad había mejorado, basándose en las lecciones aprendidas de ediciones previas. Para optimizar el proceso, las bolsas de plásticos no se ingresaron al área principal de la alcaldía, sino que se dirigieron a una zona trasera donde se pesaron y se recolectaron con la ayuda de un grupo de 30 colaboradores.

Una vez que los plásticos eran pesados y contabilizados, los participantes recibían un ticket que les permitía acceder a lo que la alcaldesa llamó "la fila de la felicidad", que los conducía a la última etapa del proceso: la entrega de juguetes. Varios de los asistentes mencionaron que llegaron desde temprano para asegurarse de obtener un regalo para sus hijos y familiares.

El evento contó con un fuerte despliegue de seguridad, con agentes de la Policía Nacional, el apoyo de la Defensa Civil, un hospital móvil y una zona especial para los niños que pudieran perderse durante la actividad.