Temporada Ciclónica

La temporada ciclónica inició oficialmente para nosotros como República Dominicana, y con ella el llamado urgente a la prevención. Como cada año, este periodo representa un riesgo real y constante para todos los dominicanos. Por esta razón, es fundamental que los ciudadanos presten atención a las informaciones emitidas por los organismos oficiales, y que actúen con responsabilidad ante cualquier alerta.

La experiencia nos ha enseñado que las tragedias no siempre las causan los fenómenos en sí, sino la falta de preparación. Por un lado, las autoridades tienen el deber y la tarea de reforzar sus planes preventivos como el de limpiar cañadas, identificar zonas de riesgo y asegurar la operatividad de los albergues. Pero también es vital que la ciudadanía asuma su rol, evitando prácticas como tirar basura en las calles, que tapan el sistema de drenaje y solo agravan las inundaciones; como también que sigan las indicaciones de las autoridades.

Más que una preocupación pasajera, la temporada ciclónica debe asumirse como una oportunidad para fortalecer la cultura de prevención. Estar informados, actuar con anticipación y respetar las indicaciones puede marcar la diferencia entre la seguridad y la tragedia. La naturaleza no se puede controlar, pero sí podemos prepararnos para mitigar su impacto.