Trump no tiene intenciones de pedir a Israel que detenga ataques contra Irán

Victor Herasme | 20 junio 2025

Washington, D.C. — El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró este viernes que no tiene intención de pedir a Israel que detenga sus ataques contra Irán, en medio de una escalada militar entre ambos países que ha alarmado a la comunidad internacional.

"Es muy difícil hacer esa petición ahora mismo", afirmó Trump al ser consultado sobre la posibilidad de influir en su aliado israelí, subrayando que su gobierno está "listo, dispuesto y capacitado" para intervenir si fuera necesario. El mandatario también señaló que su administración ha mantenido contactos con Irán y fijó un plazo máximo de dos semanas para que Teherán detenga su programa de enriquecimiento nuclear.

Trump desestimó las evaluaciones de su directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, quien asegura que Irán no está desarrollando armas nucleares. "Está equivocada", afirmó tajantemente.

Sobre el conflicto armado, Trump afirmó que "Israel lo está haciendo bien" y reconoció que el país hebreo tiene "una capacidad limitada para destruir instalaciones iraníes", aunque sugirió que podría no ser necesario un mayor alcance. También descartó una operación terrestre estadounidense en la región, subrayando que "la última cosa que uno quiere son fuerzas terrestres".

Las declaraciones del presidente ocurren tras los ataques no provocados de Israel contra Irán iniciados el pasado 13 de junio, que han desencadenado un intercambio de bombardeos. La ofensiva ha sido duramente condenada por países como Rusia y China, que acusan a Tel Aviv de violar el derecho internacional. El presidente ruso, Vladímir Putin, advirtió sobre una posible escalada con consecuencias "imprevisibles", mientras que su representante ante la ONU alertó sobre el riesgo de una "catástrofe nuclear a gran escala".

En este contexto, Washington mantiene su postura firme contra el programa nuclear iraní, advirtiendo que no descarta el uso de la fuerza para detener lo que considera un intento de desarrollar armamento nuclear, acusación que Teherán niega rotundamente al afirmar que sus actividades tienen fines exclusivamente pacíficos.