"Ridículas y un debil intento por desviar la atención"; Obama responde a las acusaciones de Trump

Washington, EE.UU.-El expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, calificó como "ridículas" y parte de un “débil intento de desviar la atención” las recientes acusaciones del exmandatario Donald Trump, quien lo señaló de liderar una conspiración para cometer fraude electoral en las elecciones presidenciales de 2016.

A través de un comunicado oficial difundido este martes por su portavoz, Patrick Rodenbush, Obama rompió su habitual silencio ante las constantes afirmaciones provenientes del entorno trumpista. “Aunque por respeto a la oficina presidencial no solemos responder a la desinformación que fluye de esta Casa Blanca, estas alegaciones son lo suficientemente indignantes como para merecer una respuesta”, subrayó el texto.

Las declaraciones del exmandatario demócrata se producen tras una nueva embestida de Trump, quien desde la Casa Blanca acusó directamente a Obama de “traición” y lo responsabilizó de orquestar una operación secreta para desacreditar su triunfo electoral hace casi una década. Según el republicano, dicha conspiración habría incluido la clasificación deliberada de documentos clave y la filtración de información falsa a medios como The Washington Post, con el objetivo de sembrar dudas sobre su legitimidad presidencial.

“Intentaron manipular las elecciones, los descubrieron y debería haber consecuencias muy severas por ello”, dijo Trump. Afirmó además que hay pruebas firmadas por Obama y que su implicación en los hechos está documentada, aunque no presentó evidencia concreta para sustentar sus acusaciones.

En una escalada de tensiones políticas, Trump también compartió en su red social Truth Social un video manipulado mediante inteligencia artificial, en el que se representa ficticiamente a Obama siendo arrestado en el Despacho Oval. El clip fue criticado por propagar desinformación y alimentar teorías conspirativas infundadas.

El republicano insistió en que el caso vincula directamente al expresidente con lo que describió como una “cacería de brujas”, una estrategia —afirmó— para desviar la atención pública de otros escándalos, como el caso del fallecido Jeffrey Epstein, acusado de tráfico sexual de menores.

Estas declaraciones reavivan la polarización en la política estadounidense a poco más de un año de las próximas elecciones presidenciales, en las que Trump ha reiterado, sin pruebas, que también fue víctima de fraude en los comicios de 2020, cuando fue derrotado por el actual mandatario Joe Biden.