Ocupan bienes de Charlie Zaa por presuntos vínculos con grupos paramilitares

Lorian Cuevas | 07 julio 2025

República Dominicana. – La Fiscalía General de la Nación ordenó la extinción de dominio sobre varios bienes del cantante de música tropical y popular Charlie Zaa, cuyo valor asciende a más de 25.000 millones de pesos, por su presunta participación como testaferro de grupos paramilitares.

Carlos Alberto Sánchez Ramírez, nombre real del artista, fue vinculado al caso tras aparecer en una declaración de un exintegrante de las Autodefensas. Según el testimonio, ofrecido dentro del proceso de Justicia y Paz, el declarante afirmó haber conocido que en el centro comercial El Oasis, ubicado en Girardot, operaban locales que presuntamente pertenecían a los hijos de un exjefe paramilitar, y que allí realizaba pagos mensuales en efectivo.

Con base en esa y otras declaraciones, la Fiscalía solicitó a un magistrado de Justicia y Paz que decretara medidas cautelares como el embargo, secuestro y suspensión del poder de disposición sobre varias propiedades a nombre de Sánchez Ramírez.

La medida responde a la hipótesis de que el cantante habría actuado como prestanombres del Bloque Tolima de las Autodefensas, facilitando la compra y administración de bienes que luego eran utilizados por la organización para lavar dinero.

Entre los bienes afectados se encuentran el centro comercial El Oasis —donde funciona una de las discotecas más grandes de Girardot— y las discotecas Kapachos y Solaris, ubicadas en la zona rosa de Ibagué.

El caso no solo compromete el patrimonio del artista, sino que también lo vincula con una presunta red de relaciones con exparamilitares. Entre los exintegrantes del Bloque Tolima que lo mencionan están Ricaurte Soria Ortiz, Indalecio José Sánchez (alias Fredy), Atanael Matajudíos y Óscar Oviedo Rodríguez, quienes detallaron en sus declaraciones vínculos de Zaa con Daniel Goyeneche, alias "Daniel", un excomandante paramilitar.

De acuerdo con la investigación revelada por la revista Semana, Charlie Zaa habría servido de intermediario en la adquisición y manejo de propiedades para fines ilegales relacionados con esa organización armada.