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Más de 30 sobrevivientes y familiares firmaron acuerdos de descargo con los Espaillat

Lorian Cuevas | 19 junio 2025

Santo Domingo.– Un documento judicial presentado por la defensa de Antonio y Maribel Espaillat revela que al menos 30 personas entre sobrevivientes, músicos, empleados y familiares de víctimas mortales firmaron acuerdos de descargo y desistimiento con Inversiones E & L, S.R.L., empresa propietaria de la discoteca Jet Set, escenario del colapso ocurrido el pasado 8 de abril.

Entre los beneficiarios figuran miembros de la orquesta del fallecido Rubby Pérez, empleados afectados por el derrumbe y parientes de personas fallecidas. Las firmas fueron legalizadas ante notario público y los acuerdos contemplan compensaciones económicas por daños físicos, emocionales y laborales. Entre las personas que firmaron figura Zulinka Yadhira Pérez Lizardo, hija del artista Rubby Pérez, quien confirmó haber recibido fondos destinados a cubrir gastos médicos, personales y cualquier perjuicio sufrido.

De acuerdo con la defensa, más de 40 víctimas han llegado a acuerdos económicos con la empresa, lo que según sus abogados demuestra una actitud de colaboración con los afectados por la tragedia.

El desplome del techo ocurrió durante un concierto de Rubby Pérez, quien murió en el acto, y dejó un saldo de 236 muertos y más de 180 heridos. Las investigaciones preliminares apuntan a múltiples irregularidades, como remoción de columnas estructurales, sobrecarga del techo y negligencia ante reportes de filtraciones y grietas hechas por empleados horas antes del colapso.

La noche del miércoles, el tribunal conoció la medida de coerción contra los hermanos Espaillat, imponiéndoles impedimento de salida del país, una garantía económica de 50 millones de pesos y presentación periódica ante el juez. Aunque se dictaron medidas restrictivas, los acusados permanecerán en libertad mientras continúa el proceso judicial.

El caso ha generado fuerte atención pública por el número de víctimas, la figura del artista fallecido y la magnitud de la tragedia. Mientras la defensa insiste en su voluntad de reparar daños, algunas familias cuestionan los acuerdos firmados y exigen justicia completa a través de los tribunales.



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