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Kemba Walker anuncia su retirada a los 34 años con esta carta

Max Herrera | 02 julio 2024

Estados Unidos.- El jugador de baloncesto Kemba Walker ha decidido retirarse del mundo del deporte profesional, a los 34 años. El base de 1.83 m. anunció su decisión a través de una emotiva carta publicada en sus redes sociales.

Durante su destacada carrera, Kemba dejó una huella imborrable en el baloncesto, comenzando como una leyenda universitaria con la Universidad de UConn, donde ganó el campeonato de la NCAA en 2011. Ese mismo año, fue seleccionado por los Charlotte Bobcats en el número 9 del draft de la NBA, iniciando así una carrera que lo llevó a jugar 750 partidos regulares y 31 en playoffs.

A lo largo de su trayectoria en la NBA, Kemba Walker brilló con los Hornets, Celtics, Knicks y Mavericks, acumulando impresionantes logros que incluyen 4 participaciones en el All-Star Game y un reconocimiento en el tercer equipo All-NBA en 2019. Sin embargo, tras dejar Boston en 2021, enfrentó nuevos retos que lo llevaron a jugar solo dos temporadas más en la liga.

Esta temporada, Kemba tuvo la oportunidad de competir en la Euroliga con el Monaco, aunque su desempeño fue variado, disputando 26 partidos con un promedio de 11 minutos y 4.4 puntos por juego, destacando con 13 puntos en un encuentro clave contra Panathinaikos en diciembre.

Con su retiro, Kemba Walker se despide del baloncesto profesional, dejando atrás una carrera llena de momentos inolvidables y un legado que perdurará en la memoria de los aficionados al deporte.

La carta de despedida de Kemba Walker

Quiero empezar esto agradeciendo a Dios por todo lo que me ha dado. El baloncesto ha hecho más por mí de lo que jamás hubiera imaginado y estoy súper agradecido por el increíble viaje que he tenido. Dicho esto, estoy aquí para compartir que me retiro oficialmente del baloncesto. Todo esto ha sido un sueño. Cuando miro atrás, todavía no puedo creer las cosas que logré en mi carrera. Sé que no podría haber llegado a este punto sin mi increíble sistema de apoyo a mi alrededor. Hay tanta gente a quien agradecer: mi mamá, mi papá y toda mi familia, mis compañeros de equipo que se han convertido en familia y los entrenadores que creyeron en mí y sacaron lo mejor de mí. El baloncesto siempre será parte de mi vida, así que esto no es un adiós.


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