Katy Perry y Orlando Bloom ponen fin a su relación tras casi una década juntos

Después de nueve años de altibajos, la relación entre Katy Perry y Orlando Bloom ha llegado a su fin. Diversas fuentes cercanas a la pareja confirmaron que el compromiso ha sido cancelado y que ambos han estado viviendo por separado desde hace algún tiempo.

Según los informes, la tensión en la relación aumentó en los últimos meses, especialmente con la apretada agenda de la cantante, quien actualmente se encuentra de gira fuera de Estados Unidos. Mientras tanto, Perry ha decidido poner en alquiler su residencia en Westcott, Montecito, la cual originalmente estaba destinada a ser el hogar familiar que ambos planearon construir. Aunque su casa principal en Montecito sigue siendo compartida, la separación física ha sido evidente, marcando un distanciamiento más profundo.

Personas del entorno íntimo de la pareja señalaron que las dificultades venían arrastrándose desde hace tiempo. “Todos a su alrededor sabían que la relación no estaba bien. Ya no compartían el mismo estilo de vida ni los mismos planes”, comentó una fuente.

Una historia de amor que comenzó en 2016

Perry y Bloom comenzaron su relación en enero de 2016, cuando fueron vistos juntos tras los Globos de Oro. Pocos meses después, en mayo, oficializaron su romance con una publicación en Instagram durante el Festival de Cine de Cannes. En marzo de 2017 anunciaron una breve ruptura, pero el amor resurgió y volvieron a unirse en febrero de 2018.

Su compromiso llegó en el Día de San Valentín de 2019, y aunque tenían previsto casarse en Japón en el verano de 2020, la pandemia alteró sus planes. Ese mismo año, en marzo, Perry reveló su embarazo a través del video musical de Never Worn White, y en agosto dieron la bienvenida a su hija, Daisy Dove, el único fruto de su relación.

Hoy, con vidas en caminos distintos, la ex pareja se enfoca en sus respectivos proyectos personales y en la crianza compartida de su hija.