Incendio sin precedentes en Texas: dos fallecidos y cientos de miles de hectáreas arrasadas

Estados Unidos, Houston.- El estado de Texas enfrenta actualmente el mayor incendio forestal de su historia, desencadenando una tragedia con consecuencias devastadoras. Dos personas han perdido la vida y la magnitud del desastre está resultando difícil de controlar, incluso con los esfuerzos de las autoridades y los bomberos.

El incendio, bautizado como "Smokehouse Creek", ha arrasado una asombrosa extensión de unas 435,000 hectáreas, y solo se ha contenido en un 5% de su alcance. Además, ha afectado también a partes del estado vecino de Oklahoma, generando una emergencia que ha movilizado recursos y atención a nivel nacional.

Este incendio supera en magnitud cualquier otro registrado en la historia de Texas, incluyendo el conocido como East Amarillo Complex en 2006, lo que ilustra la gravedad de la situación. Además, se han reportado otros incendios activos en distintas zonas del estado, sumando una superficie total quemada de más de 500,000 hectáreas.

El presidente estadounidense, Joe Biden, ha visitado las áreas afectadas y ha ofrecido ayuda federal tanto en términos de recursos para combatir el fuego como de apoyo financiero para la recuperación de Texas y Oklahoma. Biden también ha destacado la relación entre este desastre y el cambio climático, enfatizando la urgencia de abordar la crisis ambiental.

Las pérdidas humanas y materiales son significativas. Dos personas han perdido la vida en circunstancias trágicas, y numerosas propiedades, incluidos ranchos ganaderos y áreas residenciales, han sido devastadas por las llamas. La magnitud de la destrucción subraya la necesidad de una respuesta rápida y coordinada para contener el incendio y apoyar a las comunidades afectadas.

A medida que los equipos de rescate y los bomberos continúan luchando contra las llamas, la esperanza está puesta en un cambio en las condiciones climáticas que facilite las labores de extinción. Sin embargo, se espera que el fin de semana traiga vientos fuertes y clima seco, lo que podría complicar aún más la situación y propagar el fuego con mayor rapidez.