Devers se niega a jugar primera base y enfrenta al gerente de los Medias Rojas

Estados Unidos.- El dominicano Rafael Devers, actual bateador designado de los Medias Rojas de Boston, descartó este jueves la posibilidad de cambiar de posición y asumir la primera base, vacante tras la baja por lesión de Triston Casas.

Devers, tres veces All-Star, fue tajante al hablar sobre la propuesta del club de que cubriera la primera base tras la lesión de Triston Casas. “No creo que sea una decisión apropiada pedirme que juegue en otra posición”, afirmó. “Me dijeron en los entrenamientos de primavera que guardara el guante. Que solo iba a ser bateador designado”.

El dominicano ya había aceptado dejar la tercera base cuando Boston firmó a Alex Bregman. Pero ahora dice que no está dispuesto a ceder más. “Sé que soy un jugador de béisbol, pero no pueden esperar que juegue en todas las posiciones. Me pusieron en esta situación y deben asumirla”.

El jugador indicó que habló directamente con el gerente de los Red Sox, Craig Breslow, sobre la situación. “Él jugó béisbol. Me gustaría pensar que sabe que cambiar de posición no es fácil”, comentó a través del intérprete del equipo. Breslow, exlanzador de Grandes Ligas, asumió el cargo de gerente general en 2023.

Ante la ausencia de Casas, Boston ha utilizado un pelotón en primera base con Romy González y Abraham Toro. Sin embargo, Devers reiteró que no se considera una opción para esa posición, ni a corto ni a largo plazo. “Me dijeron que no querían que jugara en ninguna otra posición. Esa fue la indicación. Ahora, básicamente, deberían hacer su trabajo y buscar otro jugador”, dijo.

Consultado sobre si reconsideraría su postura en caso de bajo rendimiento del grupo actual, Devers fue enfático: “Soy bateador designado a tiempo completo”.

El jugador también expresó su malestar por lo que considera un cambio de criterio por parte del equipo. “Me dijeron que iba a jugar en esta posición. Ahora se están retractando. No creo que hayan cumplido su palabra”, concluyó.

La situación genera incertidumbre sobre cómo Boston manejará la posición de primera base en adelante, mientras Devers mantiene firme su rol ofensivo como bateador designado.