Despliegue policial en favelas de Sao Paulo dejan 39 víctimas fatales y denuncias de abusos

Brasil.- Denuncias de intimidaciones, amenazas y abusos contra la Policía de Brasil han surgido en medio de una operación en el litoral de Sao Paulo que ha dejado un trágico saldo de 39 muertos, durante una redada en las favelas de esa localidad.

La operación comenzó en la ciudad de Santos luego del fatal tiroteo que costó la vida al policía militar Samuel Wesley Cosmo durante un patrullaje. El gobernador de Sao Paulo, Tarcísio de Freitas, prometió una respuesta rápida y firme.

Sin embargo, en días recientes, familiares de las víctimas han denunciado intimidaciones por parte de los agentes policiales. Se han reportado casos de agentes presentes en funerales y entierros para presionar a los dolientes y evitar que presenten denuncias.

El presidente del Consejo Estatal de Defensa de los Derechos Humanos, Dimitri Sales, ha destacado la gravedad de las denuncias, incluyendo la presencia de agentes en velorios y cementerios, así como el ingreso no autorizado a viviendas para intimidar a los residentes.

Además, informes recientes han revelado irregularidades en las operaciones policiales, con víctimas que incluyen personas con discapacidad física. Algunos casos muestran que los agentes alegaron amenazas de personas claramente incapaces de cometerlas.

El secretario de Seguridad Pública de Sao Paulo, Guilherme Derrite, dijo que no tiene conocimiento de ningún exceso por parte de los agentes en los operativos.  

"Es importante dejar claro que ningún organismo penitenciario de la Policía, asuntos internos de la Policía Militar o asuntos internos de la Policía Civil recibió ninguna denuncia, ninguna información, ningún informe oficial, de que hubo abuso de las fuerzas policiales. Si esto sucede, con total transparencia y certeza absoluta, será investigado", afirmó.

Se investiga también la denuncia de que el Servicio Móvil de Atención de Emergencias trasladó a hospitales personas fallecidas a manos de la policía, lo que podría constituir un fraude procesal según expertos en seguridad pública.

El secretario de Seguridad Pública de Sao Paulo, Guilherme Derrite, ha negado tener conocimiento de excesos por parte de los agentes, pero aseguró que cualquier denuncia será investigada con total transparencia.

La situación plantea serias preocupaciones sobre el respeto a los derechos humanos y la conducta de las fuerzas policiales en Brasil.