Los costos del sueño del béisbol: prospectos firman por más pero reciben menos

Santo Domingo.- El reclutamiento de prospectos dominicanos para las Grandes Ligas ha experimentado un incremento significativo en los costos en las últimas dos décadas. En 2004, el promedio de pago por fichaje era de US$29,272, mientras que en 2023 se elevó a US$180,025, un aumento del 515%. Aunque la inversión total de los clubes también ha aumentado, pasando de US$42,478,960 en el año fiscal 2012-2013 a US$89,112,500 en 2023, el sistema de distribución del dinero ha cambiado.

En la actualidad, los prospectos reciben una porción menor del dinero, y más actores están involucrados en el reparto de los recursos. Ahora, los entrenadores deben comprar el talento y comprometerse a trabajar con los jugadores durante períodos más prolongados, a veces hasta cinco años, en comparación con los dos años habituales. Incluso los prestamistas se han unido a la fiesta, arriesgando sumas considerables a tasas de interés altas.

Por ejemplo, el padre de Ronny, Carlos Mauricio, reveló que de los US$2.1 millones que su hijo recibió al firmar en 2017, solo le quedaron US$819,000 después de deducir varios porcentajes, incluidos los destinados al entrenador principal, a la liga donde se formó, a otro preparador y a la Dominican Prospect League (DPL), que lo representó en los trámites de firma. Además, algunos jugadores se enfrentan a préstamos tomados por sus familias, lo que reduce significativamente la cantidad neta que reciben.

Incluso los ligueristas, dueños y entrenadores de las ligas infantiles, han comenzado a reclamar su parte en el proceso, con registros de admisión que incluyen derechos para negociar porcentajes del bono si el jugador firma con un programa de desarrollo. Los padres también han adquirido un papel más activo, convirtiéndose en los primeros "agentes" de sus hijos y recibiendo pagos para cederlos a programas de desarrollo.

Todo esto ha contribuido al aumento de los costos y ha hecho que sea más difícil para algunos programas mantenerse operativos. Como resultado, solo unos pocos jugadores logran conseguir grandes bonos, mientras que muchos programas enfrentan dificultades financieras.