Daniel Noboa o Luisa González: Ecuador decide este domingo entre la continuidad o el cambio

Ecuador enfrenta nuevas elecciones generales este domingo, tras 14 meses de una presidencia inusual y marcada por crisis políticas, económicas y sociales. Daniel Noboa, quien asumió el cargo en noviembre de 2023, es el actual presidente y, a pesar de la disminución de su popularidad, sigue siendo el favorito en las encuestas.

Tras reemplazar a Guillermo Lasso, quien se vio forzado a disolver el Congreso debido a un proceso de destitución en su contra, Noboa asumió la presidencia para completar el último año y medio del mandato de Lasso.

La seguridad y la economía fueron las principales áreas de enfoque de Noboa, pero su mandato ha estado marcado por desafíos. La violencia en Ecuador, especialmente en las cárceles y en las calles, alcanzó niveles alarmantes en 2023, y a pesar de las medidas de seguridad implementadas, como el Plan Fénix y el estado de excepción, los resultados han sido limitados.

Aunque hubo una ligera disminución en los homicidios, el promedio diario sigue siendo alarmante, y casos como el de los "4 de Guayaquil", donde militares fueron acusados de asesinar a cuatro menores, aumentaron las críticas a su gobierno por violaciones a los derechos humanos.

En el ámbito económico, el país ha enfrentado una recesión, con un decrecimiento del PIB de 1,5% en el último trimestre de 2024 y un aumento en la tasa de pobreza del 26% al 28%. La situación se agravó con apagones masivos derivados de la crisis energética, lo que generó pérdidas millonarias y descontento social.

A pesar de un préstamo aprobado por el FMI y un intento de ajuste fiscal, los problemas económicos siguen siendo un reto importante para el gobierno.

En términos diplomáticos, la administración de Noboa también enfrentó tensiones, especialmente con México, tras una controversial incursión de las fuerzas ecuatorianas en la embajada mexicana para arrestar a un exvicepresidente en asilo político.

Esta acción generó una ruptura de relaciones y críticas internacionales. Además, la relación de Noboa con su vicepresidenta, Verónica Abad, se deterioró al punto de apartarla de su puesto, lo que añadió más complejidad a su gestión.

El panorama electoral está marcado por una fuerte polarización. Noboa sigue siendo el favorito, a pesar de las críticas por su gestión en seguridad, economía y derechos humanos.

Su principal competidora, Luisa González, candidata del Movimiento Revolución Ciudadana (correísmo), cuenta con una base sólida de apoyo, pero le resulta difícil atraer a votantes fuera de su esfera política. Otros candidatos tienen poca probabilidad de llegar a la segunda vuelta, pero sus resultados podrían influir en la composición de la Asamblea Nacional.

En resumen, las elecciones de este domingo son cruciales para determinar si los ecuatorianos optan por la continuidad de Noboa o por un cambio con otro líder que pueda ofrecer soluciones a los problemas de inseguridad y economía que han marcado el gobierno actual.