Cosculluela será liberado tras pagar una fianza de 150.000 dólares

San Juan, EFE.– El artista urbano puertorriqueño Cosculluela, cuyo nombre real es José Fernando Cosculluela Suárez, pagó este miércoles una fianza de 150.000 dólares establecida por el juez Juan Vera del Tribunal de Humacao, lo que le permitirá salir de prisión.

Esto ocurre después de que una jueza revocara su probatoria la semana pasada debido a un caso de violencia de género, y le imputara cargos criminales por la muerte de dos caballos y lesiones a dos jinetes.

Según informaron las autoridades judiciales, el cantante tendrá que usar un grillete las 24 horas del día, no podrá salir de Puerto Rico y deberá entregar su pasaporte antes de abandonar la cárcel de Bayamón, donde permanece detenido.

El 12 de febrero se celebrarán dos vistas judiciales para determinar si se revoca su probatoria y se toman decisiones preliminares sobre los seis cargos por los cuales está siendo acusado, relacionados con el maltrato y muerte de los caballos, así como las lesiones a los jinetes.

Los cargos que enfrenta incluyen dos violaciones bajo la Ley 22 de Tránsito, por “conducir de manera imprudente o negligente y causar lesiones graves que requirieron hospitalización” y “por no detenerse en el lugar del accidente”. Además, se le imputan cargos de "destrucción de prueba" y "maltrato animal" que resultaron en la muerte de los caballos, de acuerdo con la Ley de Bienestar y Protección Animal.

La investigación revela que el 12 de mayo de 2024, Cosculluela, de 44 años, conducía un vehículo por la carretera PR-908 en el barrio Tejas en Humacao, cuando atropelló a los dos caballos y sus jinetes. Los caballos murieron, mientras que los jinetes, Ischamary Román Medina (18 años) y Luis De Jesús Rivera (34 años), resultaron gravemente heridos. Tras el incidente, el cantante abandonó la escena sin dejar información alguna.

El vehículo que utilizaba fue encontrado días después en una residencia del municipio de Arroyo, en el sur de la isla. La investigación estuvo a cargo del agente José Caraballo, supervisado por los sargentos Orlando Torres y Esteban Ortiz de la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales de Humacao, bajo la coordinación del teniente Josué Vázquez.