¿Licencia de maternidad y paternidad? Yes, please

Por Dra. Maria Amelia González Tejada

Hace poco asistí a un foro en el que dentro de los temas que salieron a relucir era sobre la implementación de licencia de maternidad, paternidad y de cuidador. No es mentira para nadie que en ocasiones se ha tratado de impulsar en el Congreso Nacional la habilitación de una licencia de paternidad y que se extienda la licencia de maternidad actual que existe en la República Dominicana. Y aunque las opiniones al respecto son mixtas, ambas licencias son necesarias.

La licencia de maternidad y paternidad se conoce como el periodo de tiempo que la persona esta habilitada para no asistir al trabajo con el fin de pasar tiempo con su recién nacido. En República Dominicana no existe actualmente la licencia de paternidad, y la licencia de maternidad tiene una duración de 12 a 14 semanas. En ocasiones, el padre hace malabares y toma sus vacaciones que le corresponden por ley durante el periodo de post parto de su pareja con el fin de poder estar presente durante este proceso, pero si no el permiso laboral por fines de nacimiento, en la mayoría de los casos es de 3 días.

La licencia de paternidad es necesaria, ya que permite que el padre tenga un rol activo en el proceso del post parto de la madre y en consecuencia, en la labor de la paternidad. Cuando el padre se involucra en el proceso de la recuperación de la madre luego del parto (haya sido vaginal o cesárea), en la lactancia, en el cuidado del recién nacido, esta formando un vinculo con este. No esta ayudando, a diferencia de como algunas personas quisieran colocarlo en palabras, esta comenzando a definir su rol de padre y ejerciéndolo.

Esta participación activa tiene beneficios a futuro en las habilidades aprendizaje del niño. Pero también, ayuda a fortalecer el vinculo en la pareja, y fomenta la creación de un vínculo con el bebe que no pudo necesariamente crearse durante el embarazo. La presencia del padre durante el post parto y su participación en el cuidado del bebe, también se ha comprobado que ayuda a mitigar la aparición de una futura depresión post parto, reducir los niveles de cansancio y del "burnout" maternal.

Además, la licencia de paternidad beneficia las carreras de las madres. Usualmente las responsabilidades de la crianza suelen recaer en la mujer, lo cual suele tener un impacto negativo en el crecimiento laboral de estas. Debido a que estas son las que suelen ausentarse del trabajo con mayor frecuencia, esto las inhibe de poder acceder a mejores oportunidades laborales. La licencia de paternidad permite que al ambos tener un rol activo en esos primeros días, la madre pueda recuperarse y en su defecto, poder reingresar a la fuerza laboral con motivaciones recargadas.

Las sociedades sanas emergen de familias sanas. Y si bien es cierto que como decía Tolstoi, todas las familias felices se parecen, necesitamos que existan mas familias dispuestas crear mejores sociedades, y eso inicia desde estos pequeños pasos.