Colombianos aseguran que atentado contra Uribe reabre heridas de la Colombia violenta

Martin Severino | 21 junio 2025

Aseguran que tras el ataque el pueblo está más unido que nunca.

Bogotá. – Periodistas y ciudadanos colombianos han expresado su profunda preocupación tras el atentado contra Miguel Uribe, precandidato presidencial del partido Centro Democrático, ocurrido el pasado 7 de junio en Bogotá. La agresión ha reabierto heridas del pasado y generado temor ante un posible retroceso hacia los años más violentos en la historia reciente del país.

Manifestaron que el ataque no solo fue contra un político, sino que también representó un golpe a la democracia, lo cual revive con angustia los años 90, una época marcada por la violencia política, el narcoterrorismo y la inestabilidad institucional.

Para Melisa Velázquez, una veterana periodista que hoy en día trabaja de manera independiente, “Colombia no puede, definitivamente, volver a los tiempos donde nadie podía hacer política independiente, ya fuera de izquierda o de derecha”.

La misma dejó claro que, a pesar del impacto emocional, la población ha respondido con unidad y esperanza.

Por su parte, Paula Bravo, quien trabaja como periodista para el periódico Cambio, expresó que tras el atentado “solo han regresado los fantasmas de la violencia de los años 90”.

“Va a ser un reto de la campaña llegar a un terreno neutro, donde no triunfen los ataques o el odio y los discursos polarizadores”, dijo Bravo.

Las autoridades han prometido una investigación a fondo para identificar y capturar al autor intelectual del atentado, en medio de las exigencias de justicia del pueblo, que pide también medidas concretas para garantizar la seguridad de todos los actores políticos en el país.

Mientras tanto, Miguel Uribe continúa ingresado en una clínica de Bogotá, luchando por su vida. Su estado sigue siendo reservado, y su equipo político ha pedido respeto, oración y firmeza ante la violencia.

Este episodio ha encendido las alarmas sobre la fragilidad del clima político en Colombia en vísperas de un nuevo proceso electoral, recordando que la paz y la democracia deben protegerse con firmeza ante cualquier amenaza.