El Gran Santo Domingo: 35 % de la población y 45 % de los vehículos concentrados en solo el 3 % de RD

Victor Herasme | 31 julio 2025

Santo Domingo, R.D. El tránsito en el Gran Santo Domingo —territorio compuesto por el Distrito Nacional y los municipios de la provincia Santo Domingo— se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para los conductores. Desde las primeras horas del día, las principales vías de esta urbe son tomadas por un enjambre de vehículos donde avanzar unos cuantos metros puede convertirse en una "misión imposible".

Tres factores clave explican esta crítica situación: el rápido crecimiento poblacional, el aumento acelerado del parque vehicular, y una infraestructura vial que no ha evolucionado al mismo ritmo. Las últimas obras viales de envergadura se realizaron entre 2004 y 2012, durante la gestión presidencial de Leonel Fernández. Desde entonces, el desarrollo de nuevas soluciones ha sido mínimo, en comparación con el aumento de la demanda.

Según el X Censo Nacional de Población y Vivienda de 2022, en República Dominicana habitan 10,760,028 personas, y de estos 1,029,110 residen en el Distrito Nacional y 2,769,589, en la provincia Santo Domingo, para un total de 3,798,699 habitantes, lo que representa más del 35 % de la población nacional.

De igual manera, el parque vehicular refleja una presión igual de alarmante. Según las estadísticas de la Dirección General de Impuestos Internos DGII, en todo el país había registrados al final del 2024 un total de 6,194,052 vehículos.

De esta cantidad el Distrito Nacional tiene 1,823,922 vehículos registrados y la provincia Santo Domingo 1,003,381, alcanzando un total de 2,827,303 unidades. Este número equivale a más del 45 % de los vehículos de motor registrados en todo el país.

Entretanto, la extensión territorial del Distrito Nacional es de unos 91.58 km², mientras la provincia Santo Domingo se extiende por unos 1.502,2  km², para un total de 1,593.78 km².

Esta cifra apenas supera el 3 % de los 48,442 km² que tiene República Dominicana. Es decir, que en este reducido espacio está concentrado el 35 % de la población y más del 45 % de todos los vehículos que circulan en el territorio dominicano.

La ecuación es clara y preocupante: más personas, más vehículos y una infraestructura vial estancada han convertido el tránsito del Gran Santo Domingo en una pesadilla de la que no se ha podido despertar.