Difamación y noticias falsas en redes: Casos de figuras públicas en RD victimas de esta arma digital

Ruth Encarnacion | 21 mayo 2025

Santo Domingo.-En la era digital, las noticias falsas, campañas de descrédito y difamación se han convertido en herramientas peligrosas utilizadas para atacar la reputación de figuras públicas, muchas veces desde cuentas anónimas o personas que se camuflan como periodistas. Estos ataques no discriminan profesión ni afiliación política, aunque los políticos suelen ser los más expuestos.

La actual ministra de Interior y Policía, Faride Raful, es uno de los casos más visibles. Raful ha sido blanco constante de acusaciones infundadas que no solo cuestionan su desempeño como servidora pública, sino que también intentan manchar su vida personal. Es evidente que este tipo de campañas no solo afecten a nivel emocional de la víctima, sino que también dañan a su entorno familiar, evidenciando el impacto colateral que pueden tener estos ataques.

"Fuera del cargo, seguimos siendo seres humanos, con familia, amigos, hijos", ha dicho en varias ocasiones la funcionaria, subrayando cómo estas agresiones van más allá de lo político para convertirse en un daño personal profundo.

Este tipo de violencia mediática también ha tocado a otras figuras públicas dominicanas:

Hipólito Mejía – Wilton Guerrero

En 2012, el expresidente dominicano Hipólito Mejía demandó al senador Wilton Guerrero por difamación e injuria tras acusarlo públicamente de haber viajado a Sinaloa, México, en un avión del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán. La declaración fue publicada por el periódico El Caribe una semana antes de las elecciones presidenciales de ese año.

Durante el proceso judicial, Guerrero admitió que había emitido la acusación sin contar con pruebas verificadas, reconociendo que las declaraciones fueron hechas al calor de la campaña electoral y sin confirmar previamente su veracidad. En febrero de 2018, el senador ofreció disculpas públicas a Mejía ante la Suprema Corte de Justicia, expresando su arrepentimiento por cualquier daño causado a su honor y el de su familia.

Marino Zapete, Edith Febles y Huchi Lora

Durante una semana, estos periodistas fueron blanco de una intensa campaña de descrédito en redes sociales, con más de 10,000 menciones registradas en distintas plataformas, principalmente en X (antes Twitter). Se les acusó de recibir fondos de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), en un intento de cuestionar su credibilidad. El periodista Johnny Arrendel, quien jugó el papel de ser el autor de los mensajes, publicó un comunicado en el que se retractó y admitió que la información era falsa, atribuyendo su error a una fuente no identificada y a la efervescencia nacionalista derivada del momento político.

Los casos previamente mencionados corresponden a situaciones de difamación, ya que involucraron acusaciones o rumores que fueron desmentidos públicamente y demostrados como falsos. Estas figuras públicas lograron limpiar su nombre tras la circulación de informaciones que atentaban contra su honor o reputación.

A continuación, se presentan otros ejemplos que, aunque no necesariamente implicaron difamación directa, se enmarcan dentro de la categoría de noticias falsas

Luis Abinader

Durante la campaña electoral de 2024, se difundió un supuesto audio manipulado en grupos de WhatsApp en el que se simulaba la voz del presidente dominicano, Luis Abinader, diciendo que permitiría la entrada de indocumentados haitianos al país. La subcoordinadora de la campaña del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Faride Raful, atribuyó el audio a una "ofensiva sucia y desesperada de la oposición", utilizando inteligencia artificial para crear la falsa narrativa.

Milly Quezada

En redes sociales comenzaron a circular falsos rumores sobre la supuesta muerte de la cantante Milly Quezada. La artista respondió rápidamente desmintiendo la información y aclarando que se encontraba en buen estado de salud. También lamentó el impacto emocional que estos rumores causaron a su familia, amigos y fanáticos.

Jochy Santos

En octubre de 2024, el humorista y presentador dominicano Jochy Santos fue víctima de una noticia falsa que circuló ampliamente en redes sociales, alegando su detención por presuntos problemas fiscales. La información, completamente infundada, generó preocupación entre sus seguidores y la opinión pública.

Ante la propagación de estos rumores, Jochy Santos desmintió públicamente la noticia a través de sus redes sociales y medios de comunicación, aclarando que no había sido detenido ni enfrentaba acusaciones fiscales.

Estos casos reflejan la urgencia del uso responsable de los medios y plataformas digitales. Por ello, diversos sectores han reiterado la urgencia de revisar y actualizar el proyecto de ley que regula la libertad de expresión en la República Dominicana, con el objetivo de proteger tanto el derecho a informar como el derecho al honor y la dignidad personal.